Campos problémicos en los que se dará la discusión
La salud sexual y reproductiva (SSR) es un concepto amplio que involucra múltiples dimensiones del bienestar físico, mental y social, y supone un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad. Respecto de ello, la adolescencia históricamente ha sido vista desde un enfoque fundamentalmente centrada en el riesgo, siendo incipiente una mirada asociada al bienestar.
Por su parte, la educación sexual integral (ESI), definida como “un proceso para enseñar y aprender acerca de los aspectos cognitivos, emocionales, físicos y sociales de la sexualidad” (UNFPA, 2020:9) plantea como principal objetivo contribuir a la toma de decisiones centradas en prácticas sexuales responsables y constructivas, a través de una metodología participativa, reflexiva y problematizadora (FLACSO, 2020).
A nivel de políticas públicas en salud y educación, adolescentes y jóvenes son un grupo que requiere especial atención respecto de sus sexualidades, al encontrarse en un periodo crítico de su desarrollo y dada la existencia de factores de exclusión multidimensionales, que se suman a la desigualdad generacional de sociedades adulto céntricas, profundizando las brechas en el acceso en algunos grupos particularmente vulnerados: niñas, adolescentes menores de 15 años, LGBTIQ+, migrantes, en situación de pobreza multidimensional, que residen en calle, se encuentran privadas/os de libertad y/o que forman parte de programas de protección del Estado.
Preguntas orientadoras al interior de la mesa
Se pretende generar un diálogo crítico interdisciplinario cuyo centro sea el bienestar de adolescentes y jóvenes respecto del ejercicio de sus derechos en sexualidad, a partir de la socialización de experiencias de acompañamiento, intervención, trabajo de campo e implementación de estrategias comunitarias en esta materia.
Se proponen para ello algunas preguntas que motiven la reflexión, sinergia y generación de recomendaciones desde una perspectiva de género, interseccional y situada:
* ¿Cuáles son las demandas, propuestas y necesidades que presentan, niñes, adolescentes y jóvenes para vivir sexualidades libres de riesgos y autónomas frente a la toma de decisiones?
* ¿Cuál ha sido la participación de niñes, adolescentes y jóvenes en la generación de estrategias para garantizar su derecho a servicios de salud sexual y reproductiva y educación sexual integral?
* ¿Cuáles son los principales desafíos que presentan las políticas públicas de salud y educación, respectivamente, para garantizar el ejercicio de derechos sexuales y reproductivos de adolescentes y jóvenes en Latinoamérica y el Caribe?
* Las políticas públicas en salud y educación dirigidas a adolescentes y jóvenes, ¿consideran particularidades territoriales, culturales, sociales, identitarias para su diseño e implementación?
* ¿Qué instancias e iniciativas se están haciendo cargo de garantizar el acceso a una salud sexual y reproductiva y educación sexual integral a adolescentes y jóvenes de la región?
* ¿Cómo se puede optimizar y/o fortalecer el trabajo intersectorial de las instituciones del Estado en materias de servicios de salud sexual y reproductiva y educación sexual integral?
Objetivos
Invitamos a organizaciones y actores comunitarios, investigadores, profesionales, tomadores de decisiones del área de salud, educación, protección social, justicia y otros ámbitos vinculados al trabajo con niñes, adolescentes y jóvenes, a compartir sus experiencias y reflexionar respecto de los desafíos que se presentan para generar condiciones mínimas para el ejercicio de derechos sexuales y reproductivos en la región y diseñar políticas públicas que estén a la altura de las demandas y necesidades que esta población presenta.
El principal objetivo de esta mesa de trabajo, es facilitar un espacio de reflexión crítica fundamentada, situada, interdisciplinaria e intersectorial, respecto del estado actual de las políticas públicas en salud sexual y reproductiva y educación sexual integral, dirigidas a adolescentes y jóvenes en Latinoamérica y el Caribe. Se pretende con ello, contribuir a la socialización de buenas prácticas, experiencias significativas y resultados de proyectos de investigación, que permitan caracterizar el panorama actual, consensuar recomendaciones para la implementación de estrategias pertinentes, visibilizar los desafíos en el ámbito de las políticas públicas y concientizar respecto del impacto que significa en el bienestar integral de niñes, adolescentes y jóvenes el que los estados cuenten con garantías y espacios disponibles en la materia.
Pertinencia y justificación
La entrega de servicios de salud sexual y reproductiva (SSSR) es un aspecto fundamental a considerar en todo el ciclo vital de las personas, siendo las/os/es adolescentes y jóvenes un grupo de especial importancia, por encontrarse en una etapa de la vida de continuos cambios y por consiguiente de mayor vulnerabilidad frente a los riesgos como actividad sexual no consentida, embarazos y paternidades no planificadas, infecciones de transmisión sexual (ITS), violencia de género y sexual. Por su parte, la sexualidad es un constructo sociocultural, multifactorial, por lo que abordarla como un aspecto inherente a las personas e incluirla en programas o planes de educación, permite reconocerla como parte de la identidad y desarrollo humano en toda su diversidad.
En este sentido, la Educación sexual integral (ESI) constituye un factor protector y base fundamental para promover en niñes el conocimiento de su cuerpo, su cuidado y redes disponibles de apoyo en caso de inquietudes, y en adolescentes y jóvenes, conductas y prácticas responsables, seguras y de autocuidado en sexualidad. Así mismo, permite la entrega de herramientas y conocimientos para la toma de decisiones de manera informada y promueve un pensamiento crítico en torno a la temática. La perspectiva de género y derechos humanos, como principales ejes de la ESI, contribuyen a la identificación de mandatos y estereotipos sexistas presentes en nuestra cultura, por la incidencia que posee en la manera en que nos enfrentamos a nuestras sexualidades, como también al desarrollo de relaciones interpersonales respetuosas e igualitarias.
Al respecto cabe preguntarse ¿Todas/os/es las/os/es adolescentes y jóvenes tienen posibilidad de acceder oportunamente a una atención en salud sexual y reproductiva y educación sexual integral?
Hay consenso al señalar que existen grupos de adolescentes y jóvenes que presentan mayores brechas para acceder oportunamente a redes en salud y educación, pese a que son quienes más lo requieren. En un estudio reciente de UNPFA (2021), se enfatizó que, en cuanto a la toma de decisiones en sexuales, niñas, adolescentes y mujeres muchas veces no tienen claridad de su derecho a decir que no, lo que conlleva las más desfavorables consecuencias biológicas, psicológicas, sociales y económicas de la falta de acceso. Otras revisiones en torno al tema, muestran la incidencia de otros factores de exclusión en la profundización de estas brechas, como la pobreza multidimensional, condición migratoria y experiencias de vulneración de derechos en su trayectoria de vida.
Frente a este escenario, es de suma urgencia reflexionar sobre el panorama que presenta la región en torno a estos temas, interpelando de manera crítica las políticas públicas disponibles, revisando el cumplimiento de compromisos internacionales y las condiciones que presentan los países para hacer efectivo la implementación de estrategias intersectoriales pertinentes, específicas y basadas en evidencia.